Cereso Morelia, del fracaso del IMSS a un terreno sin rumbo claro y en la mentira nacional en Michoacán

Morelia, Michoacán, 9 de septiembre de 2025.- Luego del rotundo fracaso de la descentralización de los sistemas de salud en el país, y particularmente del traslado de las oficinas centrales del IMSS que prometió el expresidente Andrés Manuel López Obrador, en Michoacán persiste el vacío y la incertidumbre sobre el destino del terreno que alguna vez se presentó como la joya de esa transformación.

El espacio que iba a albergar el “gran polo nacional de salud” terminó convertido en un símbolo de incumplimiento. El gobierno estatal, ante la imposibilidad de rescatar la fallida promesa presidencial, decidió modificar su vocación original para destinarlo a otros proyectos que, lejos de resolver las necesidades estructurales en atención médica, solo abonan a la confusión y a la sospecha de improvisación.

Lo que en campaña y discursos oficiales se presentó como un motor de desarrollo para Michoacán y un beneficio directo para miles de derechohabientes del IMSS, acabó siendo una ilusión más. Ni llegaron los empleos prometidos, ni se generó la infraestructura hospitalaria anunciada, ni se dio el impacto económico esperado en la región.

Hoy, el terreno es recordatorio incómodo de cómo las grandes promesas federales en salud terminaron diluyéndose, y de cómo el gobierno estatal parece dispuesto a reciclar viejas expectativas en lugar de encarar con seriedad la crisis hospitalaria que padece la entidad: clínicas sin médicos, hospitales sin medicamentos y pacientes sin tratamientos.

La descentralización del IMSS no solo fracasó, sino que dejó tras de sí un terreno marcado por la desconfianza ciudadana. Lo que venga en ese espacio, si no se hace con visión de largo plazo y con compromiso real, corre el riesgo de ser otra charlatanería política en la larga lista de anuncios incumplidos.