*Con muy poco que presumir en medio de una crisis sanitaria, económica y de seguridad, llega el segundo informe de AMLO.
MÉXICO SOMOS TODOS
Agosto 21-2020/ Por. M. Mandujano.
Históricamente estos mensajes son utilizados para enumerar una larga lista de logros y resultados, inversiones únicas en su tipo y beneficios como nunca antes y por supuesto para contrastar los avances con gobiernos anteriores; sin embargo, hoy será diferente.
Hoy el mensaje se centrará en la polarización y la justificación, en minimizar los errores al grado de desaparecerlos y magnificar las cifras por cierto cada vez mas difíciles de maquillar que en la retórica de “otros datos” siempre le favorecen, en seguir calificando de corruptos a los gobiernos anteriores tratando de compensar con esto la falta de resultados.
También escucharemos un endeble optimismo que en el centro de esta tormenta, solo rayará en lo repetitivo de que lo peor ha pasado, que la crisis ha quedado atrás y que vamos por buen camino, la autocrítica será sin duda alguna la gran ausente.
Más de un millón de empleos formales perdidos y cerca de 10 millones en el sector informal, una caída de más del 17% en la economía (Inegi), intentos de reactivación con grandes reservas, sectores olvidados, nulos resultados en el combate a la inseguridad, una dudosa estrategia en el manejo de la crisis sanitaria que nos tiene en números catastróficos de muertes y contagios, hacen difícil que el optimismo se convierta en protagonista en esta realidad.
Destacará sin duda los programas sociales (sus símbolos) que por mucho tiempo le han sido rentables y que son imprescindibles en cada uno de sus mensajes, proyectando su fortalecimiento hacia el presupuesto 2021.
El caso Lozoya tendrá también su puesta en escena en el mensaje como eslabón hacia la historia de corrupción arraigada en los gobiernos anteriores.
La poca esperanza estará enfocada en lo inmediato: en la noticia de la producción y distribución gratuita de la vacuna contra el covid-19. (Proyecto que por cierto no es del gobierno).
Así pues, la expectativa de grandes anuncios se quedará en la imaginaria de un México que pudo ser y que no ha sido.
Poco a nada escucharemos del campo, las mujeres, migrantes, emprendedores, innovación, ciencia y tecnología, inversiones, infraestructura, exportaciones, turismo, etc.
México necesita certeza en el rumbo y claridad en el camino.
México necesita liderazgos que sumen y no que dividan.
México necesita trabajo en equipo y compromiso.
México somos todos.