Así se ve, lo que se dice...
Por: Alberto Torres/ altorre
01.09.2021
Es una verdadera pena que los magistrados y magistradas del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán, se hayan convertido en comparsas de las irregularidades y que su trabajo de jugadores esté cada día más comprometido con los arreglos bajo la mesa que con el deber cívico que los llevo a esta magistratura.
Solo basta ver la cantidad de dictámenes que la Sala Superior o el TEPJF, está revocando, en los alegatos del pasado proceso electoral del 6 de junio; tal vez les quedó grande la yegua, o les faltó jinete, porque definitivamente lejos de dar certeza y legalidad a los procesos de impugnación, confunden y sueltan las riendas a la especulación, al grado que hoy no se tiene una certeza madura de quien o de que manera terminará el denominado Juicio Madre interpuesto por el Equipo por Michoacán, pero lo más importante. La elección de gobernador.
Lo cierto es que los ánimos se están caldeando, y mientas el denominado equipo por Michoacán, permanece a la espera de las resoluciones de la Sala Superior del Poder Judicial de la Federación, los partidos morena y Pt, ya se preparan para ir a la resistencia civil, incluso con manifestaciones en la capital del país.
Eso pasa cuando las impugnaciones son tratadas como revistas de vaqueros, en el trono de las ocurrencias, terminando en el cesto de los recuerdos.
Y es que hasta ahora muchos de los casos resueltos por el TEEM, no han dado más que dolores de cabeza a candidatos y partidos, y tal vez, solo tal vez un agradable sabor a metal en los bolsillos de los magistrados.
Al tiempo; se espera que para mediados de septiembre, o sea la noche que se conmemora el Grito de Independencia, sea también la fecha en que la resolución de la Sala Superior llegue a los estrados y con ello arranque el calvario de manifestaciones en medio de la Pandemia de COVID-19, en donde el daño podría ser mayor. O bien el remiendo de ocurrencias para dar paso a a un nuevo proceso electoral...