Por: Juan José Rosales Gallegos/ Altorre
Morelia, Michoacán 31 de agosto 2021.- Lo que debió ser un acto solemne e histórico, magistradas y magistrados del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán (TEEM) lo convirtieron en un hecho vergonzante y reprobable. A hurtadillas, actuando con el apremio de la falta de honradez, minutos antes de las 12 de la noche del domingo 29 de agosto, confirmaron a Alfredo Ramírez Bedolla como gobernador electo de la entidad.
El TEEM está integrado por los magistrados, José René Olivos Campos y Salvador Alejandro Pérez Contreras. Las magistradas, Yurisha Andrade Morales, Yolanda Camacho Ochoa y Alma Bahena Villalobos, todos con una amplia currícula académica y administrativa; también, con historias personales, nexos y compromisos que son la razón y origen de muchas de sus determinaciones. En el pleno, siempre hay algo que pesa más que los argumentos jurídicos. Por cierto, alguno de los integrantes de este órgano jurisdiccional con perversas aficiones, bien identificadas y recordadas en la Facultad de Derecho de la UMSNH.
Una de las funciones constitucionales más importantes del Tribunal es, “declarar la legalidad y validez de la elección a Gobernador del estado”. Son ellos los que determinan quien tendrá la honrosa y complicada encomienda de gobernar Michoacán, algo nada fácil, de la siguiente forma: “Expídase la constancia de legalidad y validez de la elección y emítase el bando solemne de la presente declaratoria, mismo que deberá ser fijado con la solemnidad correspondiente en las sedes de los poderes del estado”.
Pasaban de las 12 de la noche, ya era lunes 30 de agosto, “la solemnidad correspondiente” era el manto de la noche, el más denso de todos, el que marca el inicio de la semana laboral qué obliga a un sueño más profundo y repele las vigilias. Ganar una elección tan competida para erigirse como titular del poder ejecutivo de Michoacán, ¿merece ese trato? Los ciudadanos que acudieron a las urnas, venciendo el miedo al Covid-19 (y otros factores), que confiaron en las instituciones, ¿deben enterarse a la medianoche de un domingo quién será su próximo gobernador?
No hay quien obtenga beneficio de la decisión de las magistradas y magistrados. Carlos Herrera, ya sabía que los argumentos expuestos para defender su causa serían someramente analizados; se rechazaron desde antes de ser presentados. Alfredo Ramírez Bedolla, sigilosamente y con premura, estrena su calidad de gobernador electo. “La forma es fondo”, una de las frases más usadas de Don Jesús Reyes Heroles.
En el pleno del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán, siempre hay algo que pesa más que los argumentos jurídicos. Las palabras de quién lo preside, Yurisha Andrade, revolotean en la oscuridad: “Estoy convencida de que la calidad de la democracia necesita un arbitraje sólido, sin sesgos y sin favoritismos, porque un escenario de competencia y pluralidad no admite incertidumbre jurídica o decisiones cambiantes y contradictorias”.
Desde la comodidad de su despacho o domicilio, opacos, tratando de ocultar sus cuestionables prácticas en medio de la noche, los letrados integrantes del Tribunal Electoral, hicieron bien su trabajo. Desconocemos quién o quienes son sus verdaderos empleadores.